Poema XII, Pablo Neruda
Para mi corazón basta tu pecho,
para tu libertad bastan mis alas.
Desde mi boca llegará hasta el cielo
lo que estaba dormido sobre tu alma.
Es en ti la ilusión de cada día.
Llegas como el rocío a las corolas.
Socavas el horizonte con tu ausencia.
Eternamente en fuga como la ola.
He dicho que cantabas en el viento
como los pinos y como los mástiles.
Como ellos eres alta y taciturna.
Y entristeces de pronto como un viaje.
Acogedora como un viejo camino.
Te pueblan ecos y voces nostálgicas.
Yo desperté y a veces emigran y huyen
pájaros que dormían en tu alma.
Popular Posts
-
No te enamores de una mujer que lee, de una mujer que siente demasiado, de una mujer que escribe… No te enamores de una mujer culta, mag...
-
Cuartel General Pasto, a 30 de enero de 1823 Mi adorada Manuelita: Recibí tu apreciable que regocijó mi alma, al mismo tiempo que me hi...
-
”Cartas a Chepita” , es la recopilación de las cartas personales entre el poeta chiapaneco, Jaime Sabines y su novia, su esposa, su mujer ...
-
-
Charles Chaplin Los padres de Charles Spencer Chaplin eran cantantes y actores de variedades de origen judío que, en su momento, alcanzaron ...
-
JOSE MARTI, como yo lo veo. (5) -escrito por mi para que tu lo leas- Yo no soy historiadora ni experta en el tema, soy una simple lectora i...
-
Amador Peña Chávez escribe en el prologo de su libro Callado Amor: "En el teatro de la vida suele ser para los amorosos una representa...
JOSE MARTI:
"A servir modestamente a los hombres me preparo; a andar, con el libro al hombro, por los caminos de la vida nueva; a auxiliar, como soldado humilde, todo brioso y honrado propósito: y a morir de la mano de la libertad, pobre y fieramente."
No comments:
Post a Comment